EICHENWALD, “la ciudad del Roble sagrado”, es la antigua capital de Thudsen.
En el escarpado valle repleto de antiguos bosques destaca claramente la peña de piedra, que se levanta como una columna, en cuya cima se encuentra el Sagrado Roble Milenario.
Dice la tradición que Eigabald “el Afortunado” tras guiar a su pueblo a través de las Montañas, vio el viejo roble en lo alto de la inmensa roca, solitario, azotado por el viento, tan lleno de orgullo y nobleza que lo adoptó como símbolo de su poder, asentándose definitivamente bajo esta sagrada protección.
La ciudad se convirtió en la residencia permanente de los descendientes de Eigabald, orgullo y legado de su linaje.
En la Terraza superior, se yergue desafiante el Roble sagrado, junto a él el antiguo palacio de Eigabald, estos recios muros con el tiempo se convertirían en el Cuartel de la Guardia.
La ciudad fortificada aprovecha las defensas naturales que proporciona el terreno, adosando torreones y murallas a esta magnífica peña, convirtiendo toda ella en un inmenso castillo, que se asoma inexpugnable sobre el espeso bosque. Donde el símbolo de poder de Thudsen, “el Gran Cuerno de Falx” sigue, como marca la tradición, colgado de la rama más fuerte del roble milenario.